Hoy, 1 de Mayo, además de ser el Día Internacional de los Trabajadores, se celebra también el Día Mundial del Asma bajo el lema que titula esta entrada, "Puedes controlar tu asma". Aprovechando la circunstancia, voy a intentar aclarar algunas cosas sobre el tratamiento y control de esta enfermedad.
Para esto voy a basarme en el modelo de "Los Tres Tubos" ideado por Carlos A. Diaz Vazquez y publicado en la magnífica página sobre asma respirar.org.
En primer lugar debemos distinguir lo que es el asma, como enfermedad crónica inflamatoria del bronquio, y lo que es una crisis de asma, provocada por la contracción de la musculatura bronquial.
Si cortamos un bronquio sano, lo veríamos como un tubo con una pared lisa y una zona central por la que pasa el aire:
Sin embargo, cuando una persona tiene asma, sus bronquios estarán inflamados, siendo esa pared más gruesa, irregular y dejando en la zona por la que tiene que pasar el aire restos de células y mocos:
¿Y que es lo que ocurre cuando tenemos una crisis? Cuando tenemos una crisis la pared se inflama aún más, y el músculo que forma la pared se contrae, cerrándose como un anillo y haciendo que el tubo por el que debe pasar el aire se vuelva aún más estrecho:
Pues bien, el objetivo de las medicinas que utilizamos para tratar el asma es que el bronquio vuelva a su estado normal. Cuando el bronquio está inflamado utilizamos fármacos que son anti inflamatorios; tenemos que conseguir que ese bronquio de pared roja vuelva a su estado "pálido" normal. Esto es un proceso lento en el tiempo y que puede necesitar varios meses. Utilizamos de forma habitual los corticoides inhalados (budesonida, fluticasona) u otro anti inflamatorio por vía oral (montelukast). Estos medicamentos se utilizan para desinflamar el bronquio y que vuelva a su estado normal; se deben utilizar durante periodos de tiempo largos y NO SON ÚTILES PARA EL TRATAMIENTO DE LAS CRISIS. Los envases de estos medicamentos son de color rojo-naranja.
Cuando tenemos una crisis, lo que necesitamos es un medicamento que RÁPIDAMENTE, sirva para que el músculo de la pared se relaje, el "tubo" se haga más ancho y podamos respirar mejor. Para esto utilizamos de forma habitual unos fármacos que se llaman Beta-2 agonistas, siendo el más usado y el más conocido el salbutamol. Estos tienen efecto inmediato, relajando el músculo y permitiendo al paciente respirar mejor. La duración de su efecto también es corta (unas horas) y cuando desaparece debemos volver a administrarlo. Por esto, estos medicamentos se emplean "a demanda", es decir cuando es necesario. Los envases de estos medicamentos, para distinguirlos de los anteriores, son de color azul.
Intentando resumir, cuando tenemos una crisis (tos intensa que va en aumento, sensación de dificultad para respirar y "pitos" en el pecho), la medicación anti inflamatoria inhalada no nos sirve, debemos utilizar el broncodilatador (los inhaladores AZULES).
Por otra parte, tratar sólo crisis tras crisis con el broncodilatador, tampoco es útil, ya que debemos tratar la patología de base con el anti inflamatorio (INHALADORES rojos).
Para quien quiera más información sobre asma os dejo unos cuantos enlaces útiles:
Sociedad Española de Inmunología Clínica y Alergia Pediátrica: http://www.seicap.es/alergia_asma.asp
Guia Española para el manejo del asma(GEMA): www.gemasma.com
Global Iniciative for Asthma (GINA): http://www.ginasthma.org/patients.html
Y para terminar un poco de música para terapia respiratoria; Mr. Sting, muy bien acompañado, y "Cada Vez que Respiras"
Una explicación fácil y sencilla. Muy buena ^^
ResponderEliminar¡Un saludo!
Gracias!
EliminarEn una sola palabra: excelente!
ResponderEliminarMuchas gracias!
EliminarNo se podía explicar mejor; claro, breve y sin complicaciones para un lector que no entiende de medicina.
ResponderEliminarAh¡ y enhorabuena por el blog, he echado un vistazo y me parece que estas haciendo un trabajo fantástico.
Un saludo.
Muchas gracias! Estás invitada a pasar por aquí y comentar cuando quieras. Un saludo.
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